Cientos de personas fallecieron en Centroamérica donde el huracán Eta tocó tierra en Nicaragua como tormenta de categoría 4 el 3 de noviembre. Las fuertes lluvias y el lento movimiento de Eta empujaron los ríos más allá de sus límites y provocaron inundaciones y deslizamientos de tierra en Nicaragua, Guatemala, Costa Rica, El Salvador, Honduras, Panamá y México. Los deslizamientos arrasaron cientos de hogares; en Guatemala, un deslizamiento de tierra cobró la vida de unas 100 personas e incluso después de que pasara la tormenta, las inundaciones catastróficas continuaron.

Los puentes arrasados y las carreteras intransitables han aislado a muchas comunidades, lo que hace casi imposible comunicarse o entregar ayuda. La Iglesia del Nazareno está respondiendo con compasión en toda la región.

En Nicaragua, Panamá y México, muchas iglesias están recolectando alimentos, zapatos y ropa para distribuir a las familias con mayores necesidades.

En Honduras, 12 Iglesias del Nazareno se han abierto como albergues para quienes fueron desplazados por inundaciones o daños. Los miembros de la iglesia, muchos de los cuales fueron rescatados, están proporcionando comida, zapatos y ropa a quienes se encuentran en los albergues.

Veinte iglesias en Guatemala albergan a familias desplazadas, y se han abierto edificios en el Instituto Bíblico Nazareno, un centro de desarrollo infantil, el seminario y un centro de distrito como espacio de refugio.

Al igual que en Honduras, los miembros de la iglesia de Guatemala están proporcionando comidas a quienes viven en los albergues emergentes, así como a los que se encuentran en los refugios administrados por el gobierno. Aunque los deslizamientos de tierra y las inundaciones siguen dificultando los viajes, un equipo de voluntarios, que incluía un médico, se dirigió a una zona particularmente afectada en Guatemala con kits de atención en crisis, ropa, medicamentos y zapatos.

El pastor Santos, del Distrito Noroeste de Guatemala, comparte la respuesta de su congregación a su comunidad.

"¡Estamos bien! La iglesia se ha unido para alimentarlos y darles ropa”, dice. “Ayudémosles con lo que Dios nos ha dado”.

En una región de bajos ingresos, el impacto de esta tormenta se seguirá sintiendo durante años.

Cómo puede ayudar

Ore

Ore por aquellos que han perdido a sus seres queridos, y ore por aquellos que enfrentan la pérdida de sus hogares, sustento, fuentes de alimentos y comunidad. Ore por los próximos meses de recuperación. Oremos por aquellos que son más vulnerables durante y después de la tormenta, especialmente adultos mayores, personas con discapacidades y personas que viven en la pobreza. Ore por los líderes de la iglesia y las iglesias que responden a las necesidades a su alrededor. Para enviar una oración o una nota de aliento, visite ncm.org/pray.

Ofrende

Las iglesias y las personas de todo el mundo pueden brindar apoyo a través de la Respuesta a la tormenta de 2020. Las donaciones se utilizarán para necesidades inmediatas, como agua y alimentos, así como para los esfuerzos de recuperación y reconstrucción a largo plazo.

Para enviar donaciones por correo:

En los EUA, gire un cheque pagadero a "General Treasurer" y envíelo a:

Global Treasury Services
Church of the Nazarene
P.O. Box 843116
Kansas City, MO 64184-3116

Asegúrese de poner 135413 en el área del Memo.

En Canadá, gire un cheque pagadero a "Church of the Nazarene Canada" y envíelo a:

Church of the Nazarene Canada
3657 Ponytrail Drive, Mississauga, ON | L4X 1W5

Asegúrese de poner 135413 en el área del Memo.

Para cualquier otro país, aporte a través de su iglesia o distrito local, designando su donación a 2020 Storm Response.