El servicio del domingo por la noche en la 30.ª Asamblea General se centró en el evangelismo cuando el superintendente general David Busic encargó a la asamblea que "sacudiera las puertas del infierno".

La superintendente general Carla Sunberg dio la bienvenida a la multitud de 6,500 personas que asistieron al Centro de Convenciones de Indiana. Después de un video que cuenta la historia de la vida transformada de un hombre, el director de la Región Eurasia, Jim Ritchie, dirigió a la congregación en un momento de oración.

Busic luego subió al escenario para dar un mensaje inspirado en Mateo 16:15-19, centrándose en el versículo 18 donde Jesús le dice a Pedro: "...sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y las puertas del reino de la muerte no prevalecerán contra ella.".

Abrió recordando las raíces de la Iglesia del Nazareno y la inspiración para el nombre de la denominación. En los tiempos bíblicos, el pueblo de Nazaret era un lugar con el que nadie quería estar asociado, sin embargo, Jesús pasó la mayor parte de su tiempo allí ministrando a los pobres y oprimidos.

“Fue esa visión la que esos primeros nazarenos dijeron: ‘Esa es la Iglesia como queremos que se nos conozca’”, dijo Busic.

Continuó explicando la diferencia entre ofensiva y defensa, diciendo: "las puertas son defensivas; las puertas están cerradas".

“Jesús nos está dando una imagen [en Mateo 16] de la iglesia a la ofensiva, atacando el infierno, haciendo retroceder sus puertas, y el infierno no sobreviviendo al asalto”, dijo Busic.

Luego contó la historia de su padre, Bobby, un "hombre de Nazaret" al que nadie quería, pero que fue bienvenido por una Iglesia del Nazareno. Esa acción cambió la vida de Bobby y, en última instancia, la de Busic.

"Bobby era un niño de Nazaret. Él era como Nazaret, como ellos vienen", dijo Busic. "Y una familia nazarena dijo: ‘Danos a tu más perdido, danos a tu más roto, danos a la persona que está más desesperada, y vamos a traerlo a esta familia’. Y cambió la trayectoria de nuestra familia para siempre”.

A continuación, exhortó a la Iglesia a estar en la ofensiva y les recordó que las puertas del infierno no prevalecerían.

"Jesús es el Señor, y Jesús dijo: 'Construiré mi iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra nosotros'", dijo Busic. "Estamos a la ofensiva. Ve ahora en el poder del Espíritu. Sé los enviados, los llenos. Sé los embajadores de Jesús”.